Casemiro, en alerta amarilla

Casemiro aguanta con la cuarta amarilla una jornada más y en Mestalla arriesgará su presencia su presencia en el Clásico del 18 de diciembre (20:00, Movistar Liga). Si el 14 del Real Madrid es amonestado ante el Valencia, el brasileño cumplirá ciclo de tarjetas contra el Barcelona y se perderá el duelo del Camp Nou después de varios partidos aguantando la quinta cartulina que le acarrease la suspensión. El mediocentro lleva 421 minutos desde su última amarilla en Liga, que vio en el minuto 39 del partido contra el Betis (2 de noviembre). Ninguna de sus cuatro faltas contra el Espanyol fue merecedora de amarilla a juicio del aragonés Jaime Latre.

La presencia de Casemiro en el Clásico lleva siendo motivo de preocupación desde hace dos meses. Su participación ya estuvo en riesgo para la fecha inicial, la del 26 de octubre, después de que viera su cuarta amarilla del campeonato contra el Granada (5 de octubre). Pero el 16 de octubre, tres días antes del partido contra el Mallorca y dos antes de que se tomase la decisión del aplazamiento del partido del Camp Nou, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) le retiró la amarilla que vio en la tercera jornada contra el Villarreal.

La amenaza vuelve a pender sobre Casemiro y el encuentro de Mestalla no parece un escenario propicio para reservar al que es, junto al capitán Sergio Ramos, el jugador más imprescindible en el once de Zidane. El internacional brasileño lo ha jugado prácticamente todo esta temporada. Sólo se ha perdido dos medias horas. 30 minutos frente al Levante (con 3-1 en el marcador en el Bernabéu) recién llegado de hacer más de 20.000 kilómetros con Brasil después del primer Virus FIFA de la temporada y para reservarlo de cara al estreno en Champions contra el PSG en el Parque de los Príncipes; y otros 30 minutos en la visita del Galatasaray al Bernabéu también con un resultado favorable (4-0). Con esos dos mínimos respiros, Casemiro acumula 1.740 minutos con el Real Madrid esta temporada, el 96,7% del total.

Ramos era precisamente el otro jugador del Madrid en riesgo de perderse el Clásico por ciclo de tarjetas. El central llevaba tres y contra el Espanyol esquivó la amenaza de una cuarta amarilla que le hiciera viajar apercibido a Valencia.

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